Tengo el placer y la satisfacción
de poder compartir con todos/as vosotros/as la publicación de mi último libro
titulado: “Vincúlate. Relaciones reparadoras del vínculo en los niños adoptados y acogidos”, editado por Desclée de Brouwer. Sale de momento, la edición impresa. Habrá más adelante, edición en e-book.
Desde que volvió a emerger en mi
mente el deseo de escribir un nuevo libro, tuve claro desde el principio que
estaría destinado principalmente a las familias adoptivas y acogedoras, y
también a todos/as los/as profesionales que trabajan en protección a la
infancia (psicólogos, pedagogos, técnicos de infancia, trabajadores sociales…)
Los maestros también deben de enseñar a estos niños y niñas, por ello, siendo
consciente de esta realidad, he destinado apartados dedicados a psicoeducarles
en esta tarea.
Venía observando en estos años de
trabajo con los/as niños/as y sus familias adoptivas y acogedoras que (no
todos/as los niños/as, por supuesto, me centro en aquéllos que presentan apegos
inseguros y trastorno del apego, que sabemos, gracias a Dios, que no son la mayoría, pero no obstante, presentan unas necesidades psicoeducativas
especiales) éstas precisaban información y formación. Me refiero sobre todo, a
las familias que dados los problemas y características de los menores, viendo la
afectación que a nivel de vínculo de apego tienen éstos y teniendo en cuenta la
forma en la que expresan la misma (mediante conductas exteriorizadas o
interiorizadas, que en realidad, son modos de comunicarnos muchas veces, el
sufrimiento que arrastran), necesitaban primero, por parte del profesional,
unas cuantas sesiones psicoeducativas (qué es el apego, la trascendencia que
tiene en la conformación de la mente en desarrollo, etc.) Antes de comenzar el
trabajo psicoterapéutico con el niño y la familia, debíamos, previamente, de
transmitir unos conocimientos y establecer un marco de comprensión de los
problemas del menor diferente de las visiones demasiado patográficas, que a
veces etiquetan demasiado y tampoco explican más allá que un conjunto de
síndromes. Pues bien, con el fin de que podamos tener un material sobre el que
basarnos, que puedan leer en sus casas y luego trabajar en las sesiones, pensé
en elaborar un libro así.
Pero no quería tampoco dejar
fuera a los profesionales, así que pensé en concebir (algo difícil eso de
escribir, por así decirlo, un híbrido)
el libro de tal modo que pudiera también interesar a éstos, especialmente a los
no familiarizados con el modelo del apego. Por ello, psicólogos, pedagogos,
trabajadores sociales, médicos, abogados, psiquiatras, maestros… pueden
encontrar en Vincúlate un material que les aporte una primera aproximación a la
visión de la adopción y el acogimiento desde la óptica de cómo la mente en
desarrollo se construye desde las primeras interacciones relacionales con las
figuras adultas a las cuales nos apegamos. Todo niño necesita, al menos, una.
Así pues, si esto falla gravemente, las secuelas se observarán a nivel de cómo el menor entra en vinculación. Éste puede posteriormente, modificar sus
patrones relacionales, pero para eso va a necesitar lo único que cura:
relaciones con adultos sanos emocionalmente con los que poder reparar el apego dañado y ganarlo a la seguridad. Y que ello le permita cambiar, poco a
poco, el chip mental primario que construyó con los primeros adultos que a
menudo, les descuidaron, maltrataron y abusaron.
El psicoterapeuta puede, desde su modelo relacional, influir
favorablemente en el niño para propiciar que su apego vaya ganando en
seguridad. Pero no sólo éste. Eso sólo no vale. Las familias adoptivas y de acogida
son también marcos relacionales que deben y pueden hacer este trabajo, los más importantes e insustituibles, los que
no pueden fallar, sus nuevas figuras de apego. Otros adultos importantes para los/as niños/as como los abuelos,
abuelas, tíos/as, padrinos, madrinas, maestros/as, vecinos/as… son igualmente
poderosos instrumentos humanos que pueden hacer mucho bien a estos niños si les
ofrecen relaciones seguras, cálidas, contenedoras y confiables. Por ello, el
libro dedica una buena parte del mismo a concienciar a todos/as de la gran magnitud
que tiene el reflexionar como padre, madre o adulto que está al cuidado y tiene
a su cargo, niños. Revisar nuestras capacidades como adultos para cuidar:
nuestro propio modelo de apego temprano (que influirá en un menor que a menudo viene dañado en esta área, no lo
olvidemos) y nuestra capacidad de empatía y de poner límites adecuadamente.
El prólogo corre a cargo de Maryorie Dantagnan, mi profesora de psicoterapia, amiga y colega, que también ha revisado y corregido el libro. Le doy mis más sentidas gracias desde estas líneas. Un precioso prólogo, que centra y recoge muy bien lo que la obra pretende.
El prólogo corre a cargo de Maryorie Dantagnan, mi profesora de psicoterapia, amiga y colega, que también ha revisado y corregido el libro. Le doy mis más sentidas gracias desde estas líneas. Un precioso prólogo, que centra y recoge muy bien lo que la obra pretende.
Tras una primera parte teórica (y he tratado de que sea amena) donde siento el fundamento de la obra en la teoría del apego (pero aplicándola
al ámbito de la adopción y el acogimiento familiar), ofreciendo las
aportaciones de numerosos autores y proponiéndoos, de cuando en cuando,
actividades y visionado de vídeos, en un segundo apartado nos centramos en cómo
evaluar el apego en los niños, qué instrumentos se pueden utilizar. A
continuación, me detengo en el concepto de parentalidad terapéutica, la que
estos menores necesitan (sobre todo los que presentan apegos más graves como el
desorganizado o el trastorno de apego reactivo) para poder reparar el daño que tienen en este dominio. El siguiente apartado se focaliza en cómo podemos
establecer relaciones reparadoras del vínculo de apego en función de la
tipología que el niño o adolescente presente en este sentido. Hay orientaciones (caminos a seguir) en función de que el perfil se acerque más (no categóricamente, desde luego) al
tipo evitativo, al ansioso-ambivalente o al desorganizado. Termino la obra con un
breve apunte sobre el tipo de psicoterapia que creo más adecuada para estos
menores.
A lo largo de Vincúlate, he
procurado poner un buen número de ejemplos y viñetas clínicas que ayuden a
comprender los contenidos, y un gran dibujante (además de excelente psiquiatra,
muchos ya le conocéis porque hablo de él en el blog a menudo. El próximo post
lo escribe él) como lo es Rafael Benito ha ilustrado con enorme fuerza
expresiva cómo
siente las relaciones el niño según el tipo de apego que presente. Mis más sentido agradecimiento también, para Rafael Benito.
También he intentado que el
lenguaje sea accesible y comprensible pero sin perder rigor científico. He procurado, en este sentido, que esté en la línea de mis libros anteriores para
tratar de llevar de manera comprensible, conocimientos que suelen ser complejos para las familias y el público
en general, para que podáis beneficiaros de los mismos y la ciencia psicológica
sea accesible para vosotros/as. Espero que cumpla esta función psicoeducativa, pues
esa es la vocación de este libro. Que llegue al mayor número posible de
familias para que éstas hagan suyo y se convenzan, auténticamente, de que sólo
el vínculo seguro o ganado a la seguridad, sana. Sobre cómo poder hacer esto, el libro abunda
en ello.
Lo he escrito con enorme ilusión y humildad, contento de
ofreceros esta obra, con muchas ganas de presentarlo. Sabéis que lo haremos en
San Sebastián en el marco de las “II Conversaciones sobre apego y resiliencia
infantil”, a celebrarse el día 27 y 28 de noviembre de 2015. Podéis inscribiros a las mismas desde esta dirección web. El día 8 de enero de 2016 estaré en
Sevilla, ya os daré información más exacta de este acto cuando se acerquen las
fechas.
Vosotros/as me diréis si lo he
conseguido.
Os doy las gracias a todos/as, especialmente a los niños y jóvenes adoptados y acogidos porque ellos/as, como dice Jorge Barudy, nos enseñan cada día a ser mejores personas.
Hola. muchas felicidades por esta publicación. Ya leo en tu post que es muy completa y será de mucha utilidad para todos los que tratan con niños adoptados y acogidos. Seguro que tu profe Maryorie Dantagnan plasma a la perfección en el prólogo tus objetivos con el libro... mucha suerte en la presentación oficial. Seguimos en contacto
ResponderEliminarIría, sin duda, a esas conversaciones sobre apego, si no fuera tan complicado atravesar más de 800 km.
ResponderEliminarEnhorabuena por el libro, que leeré en cuanto esté en mis manos.
Hola José Luis,
ResponderEliminarMe alegro mucho de que por fin salga a la venta tu libro. Lo leeré con mucha atención. Todos los padres adoptivos tenemos problemas de apego con nuestros hijos de una u otra manera, con más o menos intensidad, unos más sencillos y otros más complicados de llevar pero en resumen los niños y nosotros formamos uno y debemos saber atenderlos como se merecen.
Un abrazo y enhorabuena por la publicación.
Luisa
http://la-adopcion-en-extremadura.webnode.es/
Se me olvidó decirte. Si podemos iremos a verte a Sevilla.
ResponderEliminarUn abrazo.
Luisa
Suerte con tu libro, lo leeré. me hubiera gustado acudir a las conversaciones, además están en un marco incomparable y son muy interesates, pero no me ha sido posible
ResponderEliminarMuchas gracias de corazón por vuestras palabras, un afectuoso saludo
ResponderEliminardeseando leerlo, felicidades.
ResponderEliminarantonio.
Zorionak! Felicidades por ese libro y muchas gracias
ResponderEliminarpor la orientación hacia, entre otros , los padres adoptivos.
muy de agradecer y deseando leerlo.
un fuerte abrazo.
Edorta
Gracias Antonio! Un abrazo!
ResponderEliminarMi agradecimiento por tus palabras, Edorta. Un abrazo.
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