Mi amigo Alberto Barbero (que habita en Conversaciones sobre Desarrollo y Equipos, un blog a seguir de cerca por sus interesantísimos aportes y reflexiones) me envía esta picada que me ha dejado boquiabierto. Todavía estoy procesando su contenido. Mi abuela solía decir que hemos venido demasiado pronto al mundo (en alusión a alucinantes avances que nos perderíamos) y creo que tenía razón. Ahora bien esto parece alucinante pero tiene visos de realidad. No sé si en todo pero seguro que sí en parte.
Me estoy refiriendo a un vídeo del programa de televisión Redes que lidera Eduardo Punset. Es una entrevista a Raymond Kurzweil (experto en inteligencia artificial) Este nos explica cuáles serán los grandes hitos en esa mezcla que se va a producir –que ya se está produciendo- entre biología y tecnología.
Después de verlo, a mi me surgen infinidad de preguntas y también se me queda una cierta sensación de desazón, quizá por el miedo a lo desconocido: ¿Qué somos? ¿Quiénes somos? ¿Sólo somos un cuerpo biológico que representa la realidad y da igual que esa representación la haga un cerebro encarnado que un ordenador súper avanzado? En esta propuesta, ¿existe el ser? Todas las disquisiciones filosóficas que han llevado siglos acerca de la sustancia y en qué consiste ésta, ¿sólo son elucubraciones? ¿Puede un ordenador, una copia de mi mismo, reproducir mis pensamientos y experiencias o realmente soy yo mismo? ¿Somos reductibles a un paradigma científico o el ser trasciende más allá de cualquier modelo?
Me estoy refiriendo a un vídeo del programa de televisión Redes que lidera Eduardo Punset. Es una entrevista a Raymond Kurzweil (experto en inteligencia artificial) Este nos explica cuáles serán los grandes hitos en esa mezcla que se va a producir –que ya se está produciendo- entre biología y tecnología.
Después de verlo, a mi me surgen infinidad de preguntas y también se me queda una cierta sensación de desazón, quizá por el miedo a lo desconocido: ¿Qué somos? ¿Quiénes somos? ¿Sólo somos un cuerpo biológico que representa la realidad y da igual que esa representación la haga un cerebro encarnado que un ordenador súper avanzado? En esta propuesta, ¿existe el ser? Todas las disquisiciones filosóficas que han llevado siglos acerca de la sustancia y en qué consiste ésta, ¿sólo son elucubraciones? ¿Puede un ordenador, una copia de mi mismo, reproducir mis pensamientos y experiencias o realmente soy yo mismo? ¿Somos reductibles a un paradigma científico o el ser trasciende más allá de cualquier modelo?
Al margen de que todo lo que se dice sea factible, yo creo que la cuestión de fondo, a parte de reflexionar sobre quiénes somos, es también la previsión de una sociedad tecnocratizada. ¿Quiénes la dominarán? ¿Con qué fines? ¿Los seres humanos? ¿Los propios ordenadores, como en Matrix? Kurzweil dice al final del vídeo (y lo termina apostillando Punset) que la propuesta es humanista (belleza, conocimiento, espiritualidad, simetría…) y que aunque cambiemos nuestro sustrato biológico y lo mejoremos seguiremos siendo humanos. Que así sea. Las dudas son, como decimos, una vez más en la historia, en manos de quiénes caerá el control de esta tecnocracia que conlleva un inmenso poder. Y hay muchas manos cuyos fines no son precisamente filantrópicos. Hemos de aprender a extender el buen trato entre todos los seres humanos si queremos que la tecnología sea para bien.
Espero vuestras opiniones. Felices vacaciones de Semana Santa a todos/as.
Espero vuestras opiniones. Felices vacaciones de Semana Santa a todos/as.
Para ver la entrevista a Kurzweil, haz click aquí.