Ayer tuve el honor de compartir una jornada de trabajo y convivencia con las familias acogedoras de Gipuzkoa, en el Palacio de Miramar de Donostia.
Organizada por la Diputación Foral de Gipuzkoa, con la colaboración de la Asociación BEROA (Asociación de familias acogedoras de Gipuzkoa) y el Centro Lauka (Equipo psicológico especializado en el apoyo al acogimiento familiar), me pidieron impartir la conferencia marco sobre la cual pivotaría el resto de la jornada de trabajo: “El conflicto de lealtades en el acogimiento familiar. La perspectiva del niño y del adolescente”
Organizada por la Diputación Foral de Gipuzkoa, con la colaboración de la Asociación BEROA (Asociación de familias acogedoras de Gipuzkoa) y el Centro Lauka (Equipo psicológico especializado en el apoyo al acogimiento familiar), me pidieron impartir la conferencia marco sobre la cual pivotaría el resto de la jornada de trabajo: “El conflicto de lealtades en el acogimiento familiar. La perspectiva del niño y del adolescente”
La inauguración de la jornada fue presentada por el Director del Departamento de Política Social de la Diputación Foral de Gipuzkoa, José Ignacio Insausti. Después intervino, dentro de la inauguración, la presidenta de la Asociación BEROA.
Posterior a la charla-marco, se organizaron tres grupos de trabajo de familias, divididos en función de la edad que tuviesen los menores acogidos, donde tenían que trabajar en base a unas preguntas orientadoras. Posteriormente, se realizó una puesta en común al gran grupo. Tras ello, se celebró una comida de cierre de la jornada. A todo esto, los niños también disfrutaron de un día de convivencia, pues estuvieron realizando distintas actividades lúdicas.
Me impresionó y emocionó la entrega de los acogedores, su dedicación a los niños a quienes han integrado en sus familias, gracias a los cuales pueden recibir la educación y la experiencia vincular que necesitan para poder interiorizar el fundamento seguro del que carecieron por las experiencias adversas que sufrieron en forma de malos tratos, abandono, abuso o negligencia. “El mundo funciona gracias al trabajo callado de gente buena”- suele decir un amigo mío. Y se puede aplicar con total rotundidad en este caso.
Asistieron 125 acogedores que tienen a su cargo (cuidando, dando afecto, cariño, normas, valores, actitudes…) a 202 menores. Una madre expresó en uno de los grupos una frase que concentra el sentir se estas familias: “Para mí es lo más positivo que me ha pasado en la vida, poder asistir a la felicidad de la niña que tengo acogida”
Gracias a todos, y en particular a la Unidad de Acogimiento Familiar y Adopción de la Diputación Foral de Gipuzkoa, quien me propuso acudir, por invitarme a la ya novena jornada. Felicidades por la labor que hacéis y continuad adelante, espero poder haber aportado algo positivo a vuestro camino con los niños. El camino es duro y dificil, sí, pero a la par muy gratificante, pues un ser humano en desarrollo puede ser rescatado y recibir lo que merece para que el día de mañana pueda estar en disposición de integrarse en sociedad.
Me impresionó y emocionó la entrega de los acogedores, su dedicación a los niños a quienes han integrado en sus familias, gracias a los cuales pueden recibir la educación y la experiencia vincular que necesitan para poder interiorizar el fundamento seguro del que carecieron por las experiencias adversas que sufrieron en forma de malos tratos, abandono, abuso o negligencia. “El mundo funciona gracias al trabajo callado de gente buena”- suele decir un amigo mío. Y se puede aplicar con total rotundidad en este caso.
Asistieron 125 acogedores que tienen a su cargo (cuidando, dando afecto, cariño, normas, valores, actitudes…) a 202 menores. Una madre expresó en uno de los grupos una frase que concentra el sentir se estas familias: “Para mí es lo más positivo que me ha pasado en la vida, poder asistir a la felicidad de la niña que tengo acogida”
Gracias a todos, y en particular a la Unidad de Acogimiento Familiar y Adopción de la Diputación Foral de Gipuzkoa, quien me propuso acudir, por invitarme a la ya novena jornada. Felicidades por la labor que hacéis y continuad adelante, espero poder haber aportado algo positivo a vuestro camino con los niños. El camino es duro y dificil, sí, pero a la par muy gratificante, pues un ser humano en desarrollo puede ser rescatado y recibir lo que merece para que el día de mañana pueda estar en disposición de integrarse en sociedad.
2 comentarios:
Este año he participado como familia acogedora en la XI jornada. La dinámica ha sido igual a la que describes y el ponente Felix López de la U. de Salamanca. Gracias por tu blog, lo seguiré; todos los recursos son biemvenidos en esta tarea tan bonita y gratificante.
Gracias Amaia, y me alegro de que el encuentro que tuvisteis con un profesional tan prestigioso fuese gratificante. Saludos.
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